Venancio
Señor Paco
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La inmigración masiva que sufre Europa no surge porque sí, varias son las causas, la principal son los alubios y sus perros-lamecoños, los rojos, con su cada día más evidente plan para destruir occidente y levantar su sueño socialista sobre la cenizas de nuestra civilización, el otro son las tías y los maricas, no todas ni todos por supuesto, pero sí una amplia mayoría de ellas y ellos.
Imaginaos que a través de los Pirineos nos estén llegando un goteo incesante de veinteañeras ucranianas que, con la disculpa de venir huyendo de la guerra, buscan establecerse aquí. Imagínatelas llegando a cientos en pleno julio, hacinadas en coches patera sin aire acondicionado, sudorosas, con sus camisetas mojadas marcándo sus pezones, con sus interminables piernas de piel blanquita como la leche y sus shortcitos metiéndose bien adentro en la raja del coño... Obviamente la inmensa mayoría de los tios de este país, +las bolleras, estaríamos encantados de que tanto partidos políticos como ONGs y todas las instituciones de este país se volcaran en auxiliar a estas pobres chicas, normal, cuantas más entrasen más probabilidades tendríamos de catar uno de esos chochitos del este
Ok, pues ahora ponte en el lugar de una charo cuarentona derroida que ve desembarcar todos los días a cientos de jóvenes subsaharianos con sus cuerpos sudorosos manchados de arena, oliendo a sal y a cuero, corriendo por la playa delante de los maderos... Que pasaría? Pues lo mismo que he puesto más arriba, que el chocho se te haría agua y, aunque sólo fuese inconscientemente, harías todo lo posible para que ese manantial de vergas negras no parase nunca.
Rojos y hembras, cada uno con sus motivaciones, ambos culpables de la invasión.
El enemigo no viene de fuera, lo tenemos en casa. Son nuestros amigos zurdos, el profe de la autoescuela, el funcionario del inem, las compañeras de curro, las chavala tan buenorra del gym, tu prima, tu cuñada, tu hermana...y hasta puede que tu madre.
Imaginaos que a través de los Pirineos nos estén llegando un goteo incesante de veinteañeras ucranianas que, con la disculpa de venir huyendo de la guerra, buscan establecerse aquí. Imagínatelas llegando a cientos en pleno julio, hacinadas en coches patera sin aire acondicionado, sudorosas, con sus camisetas mojadas marcándo sus pezones, con sus interminables piernas de piel blanquita como la leche y sus shortcitos metiéndose bien adentro en la raja del coño... Obviamente la inmensa mayoría de los tios de este país, +las bolleras, estaríamos encantados de que tanto partidos políticos como ONGs y todas las instituciones de este país se volcaran en auxiliar a estas pobres chicas, normal, cuantas más entrasen más probabilidades tendríamos de catar uno de esos chochitos del este


Ok, pues ahora ponte en el lugar de una charo cuarentona derroida que ve desembarcar todos los días a cientos de jóvenes subsaharianos con sus cuerpos sudorosos manchados de arena, oliendo a sal y a cuero, corriendo por la playa delante de los maderos... Que pasaría? Pues lo mismo que he puesto más arriba, que el chocho se te haría agua y, aunque sólo fuese inconscientemente, harías todo lo posible para que ese manantial de vergas negras no parase nunca.

Rojos y hembras, cada uno con sus motivaciones, ambos culpables de la invasión.
El enemigo no viene de fuera, lo tenemos en casa. Son nuestros amigos zurdos, el profe de la autoescuela, el funcionario del inem, las compañeras de curro, las chavala tan buenorra del gym, tu prima, tu cuñada, tu hermana...y hasta puede que tu madre.